domingo, 21 de septiembre de 2008

dia sabado ecologico hasta la manija



vamos de paseo...pi pi pi, en una hilux !!


si si sres, nos vamos de paseo ecologico a limpiar la playa y el mar




mmmm, a emma no le gusta ni medio pero transa




a eloisa , todo ya le es familiar, ella sabe que el arroz es la base de toda buena y sana comida timorense, que el agua de la playa es calentita, que el yogur le gusta mas que la leche y que pronto nos traducira del tetum al castizo o al ingles al instante




fuimos a reunirnos con un grupo de ecologistas atrevidos( 10,30 de la mañana calor de 200 grados a la sombra) a juntar con una bolsa y guantes descartables, basura en la playa,


los compañeritos de la escuela de emma estaban todos alli, firmes como un batallon,


silvio convencio a emma de encontrar la basura mas original para ganar un premio...accedio...




a las 12 ya termino la limpieza y (sticker que nos avalaba como buenos ecologistas) nos fuimos contentos a almorzar a casa




Rato despues salimos hacia el mas alla , hacia la izquierda, pasamos por el "bunker" de Ramos Horta (que tuvo que fortificar su morada despues del atentado que tuviera en febrero pasado) y seguimos hacia el este, hacia el timor(que significa oriente)


este pais se llama asi Timor Lorosae (oriente por donde el sol sale) no mas oriente que este.


Salimos hacia el este y pasamos por un par de pueblitos....no esperen calles , solo la ruta , casa a sus costados, el cementerio mas lejos y el mar increible a nuestra izquierda siempre




Pasamos por Hera, Metinaro y nos detuvimos en la Ponta Hatolana Rein, habia una playa fantastica, eran las 5 de la tarde y el sol ya no abrumaba y nos metimos en el mar, Eloisa atras nuestro, aguas cristalinas, trozos de coral por toda la playa, caracoles bonitos, un barquito de pescadores paso saludandonos... un paraiso que da frente al mar de (Las Flores?, Timor?) aun no sabemos el nombre...yo lo averiguaremos




En el viaje de vuelta compramos un canasto hermoso .


A la llegada a casa, preparamos la cena y esperamos a Lucinda ( una amiga mejicana que trabaja para la Unicef


Mañana, Silvio, parte de viaje de trabajo a Australia...nueva etapa....un co equiper menos por una semana.......y un cambio de empleada........


La "ama de casa desesperada"(que vengo a ser yo) esta un poco frustrada , veremos si este cambio me ayuda...si no , la siguiente nominada sere yo... y no me quiero ir de la casa

jajajajajaja


saludos a todos


esta es mi primera entrada a un blog !


:)

martes, 16 de septiembre de 2008

Y se movió la Tierra...

Y sí señores... se movió la tierra...

Estábamos haciendo fiaca después de la fabulosa cena que preparó Norma (otra más de sus fabulosas cenas a las cuales no terminamos de acostumbrarnos por suerte), cuando de repente siento que el piso se me mueve. Habiendo tomado al final de la cena el Tropicur, me dije "Zas, otra vez el efecto vomitivo de esta maldita medicina anti malaria" (se imaginarán que ZAS no me dije...)

Pero la sensación era ligeramente diferente, y además se movia la lampara colgada del techo. Una confirmación alrededor y también el ventilador del techo estaba bamboleante. Y Norma se preguntaba quién estaba tratando de entrar dado que la puerta estaba a los golpes...

Y no, no era el efecto del Tropicur, o caníbales al acecho, era un temblor que nos estaba moviendo el piso. Duró... no se qué, como unos 10 segundos, y después pasó. No se fué la luz, así que grave no era, tampoco despegaron raudos los helicópteros, así que tampoco tsunami a la vista, y tampoco sonó el celular de Albertina con mensajes de escapar de la misión, así que quedó todo para esta simpática entrada...

Según el reporte el temblor no se sintió en Dili, la capital de la tiny nation of East Timor... joder! Es mi primera experiencia, pero se me movió la estantería... (6.3 de magnitud a una profundidad de 30-40Km a 140Km al Este de Dili)

viernes, 12 de septiembre de 2008

Gané en el Juego de la Oca!


Alguna vez uno gana, no? Por lo menos así lo predice la estocástica en este Universo...

Muchos se preguntaran cómo fué el viaje... Cómo llegué y cómo la pasaron las chicas....?

Albertina adelantó algo, pero ella sólo pudo ver el final de la película. Pero dado que no escribí nada, vamos a ir por partes. Este va a ser una entrada un poco más animosa, dado que alguna vez uno gana en el Juego de la Oca, no? Es simplemente una cuestión de probabilidades, no? Como yo digo siempre: no hay nada que hacer contra la 2da Ley de la Termodinámica: hagamos lo hagamos estamos fritos, en algún momento dejamos de existir. Period.

Era una entrada más animosa? Sí, claro! Sólo que quizás hay que entenderme o conocerme, o como dice mi hermano: es cuestión de "meimportaunculo", o de "ateísmogenético" como digo yo... La cosa es que el Universo es así, pero también es súper interesante, que joder...

Este último párrafo se parece a la película donde Alterio gritaba "Que lindo es estar vivo" o alguna pelotudez por el estilo (Caballos Salvajes??? alguna vez me dediqué a mirar cine argentino, que error...). Bueno, los que me conocen saben que lo mío no es así, pero no me pidan ahora que lo explique mejor...

Vayamos a los hechos concretos...

Cómo me saqué la Loteria


El Martes 2 de Septiembre decido salir temprano al aeropuerto. Sólo la cantidad de bultos que tenía aconsejaban llegar temprano, asegurarse el carisma de Emma y el llanto de Eloísa en el check-in y negociar algunos kilos de más...

La cuenta final para despachar eran 6 bultos o valijas:
  • 3 Samsonites de 25 kgrs de capacidad, en promedio cada una tenía 25 kgrs
  • 1 mochila Outside 80+10 ltrs, cargada a tope, con 22 kgrs. Una farmacia andante
  • 1 bolso con 10 kgrs de juguetes y ropa de las niñas
  • la cuna funcional de Eloísa

Dijese lo que dijese mi mujer, dejé el cochecito! Eloísa no lo usaba más, y sólo pensar de arrastrarlo por todo el Pacífico y Australia me daba un no se qué...

A las 15:30 en punto pasa por casa Alejandro, un amigo a buscarme. De fierro!

Y ahí nos fuimos a Ezeiza o Ministro Pistarini...

Ya en la cola, una chica de tierra de LAN me avisa que hay un vuelo más temprano. Mi pregunta es rápida "Qué avión es?", "Un 767" me contesta. Ni lo dudo: apuro todo para subirme a este vuelo y no al infame LAN 570 de las 20:30. Para aquellos que no lo sepan ese vuelo es infame por tres cosas básicamente:
  1. es un Airbus A320
  2. el 100% del pasaje es gente de negocios: van apurados, de mal humor, y no despachan nada. Así que todo va en los buches, y nadie me va a dar prioridad por las nenas (malhumoradas personas de negocios), y no voy a tener lugar donde poner lo que llevo de mano...
  3. Siempre se retrasa el maldito. Yo creo que lo hacen para poner de mayor mal humor a las malhumoradas personas de negocios...
En el check in la chica me cobra una sola valija como exceso de equipaje y me las despacha hasta Sydney, aunque me asegura que el despacho vale hasta Darwin. Me pregunta que llevo de mano, y cuando ve lo que pensaba llevar de mano (otra valija de 15 kgrs capacidad máxima con ropa de Eloísa y Emma para el viaje) se apiada de mí (recuerden: Eloísa a upa y llorando, y Emma preguntando de todo: 1000 puntos de carisma), y me despacha la valija sin cobrarme exceso de equipaje. Vamos! Unos pasitos para adelante en el Juego de la Oca!

La llamo a la co-equiper Norma a ver si llega temprano, pero había calculado correctamente subirse al de las 20:30. Así que le digo que me voy en el avión grande y la espero en Santiago.

En otra entrada ahondaré en los detalles de viajar con 2 niñas y muerto de cansancio (arrastrándo menos de 4hs de sueño en las últimas semanas), así que vayamos a los hechos:
  • En Santiago me piden identificarme a la entrada del avión cuando aterrizamos, me pregunto porque será, muy dormido para poder anticiparme a lo obvio: el LA 570 está retrasado y no va a llegar a la conexión pero
  • "su esposa nos dijo que usted siguiese viaje a Sydney"... "Mi esposa?"
  • Bueno era Norma en realidad, pero conociéndo a los chilenos, mejor no ahondar en explicaciones. Sigo a la chica de LAN, y cuando empiezo a poner las cosas mano por los Rayos X cuento "uno, dos, tres, .... me falta, me falta, el bolso con los pañales, mamaderas y leche de Eloísa". Se me había quedado en el avión. Por suerte lo encontraron! Mientras tanto Eloísa casi pasa por adentro de los rayos X...
  • Reviso el itinerario con la gente de LAN, les pido 5 minutos para despertarme y pensar con más calma (pido gancho fué lo mío), y me dije...
  • "a ver, en vez de hacer noche en Sydney, hago noche en Santiago. Tanto Norma como yo llegamos al vuelo de Sydney Darwin, solo es pasar el día en Sydney. Y acá está la familia Parraud!", me vuelvo a la chica y le digo: "Miré, mi Sra seguro va a preferir que volemos juntos de Santiago a Sydney", "Claro Sr, ya le buscamos hotel a su familia, y cuando llegue su Sra la mandamos al hotel". Ahora entienden porqué era mejor no aclarar la filiación con Norma?
Esta escala en Santiago la quise hacer antes, justamente para visitar a los Parraud antes de irnos para Asia, pero LAN me cobraba USD2000 sólo por hacer el cambio. El motivo? Por quedarse una noche en Santiago calificaba como viajante malhumorado de negocios que para ponerlo de más mal humor, les cobrás un montón de dinero por cualquier escala...

Ahora no sólo no me cobraban, sino que además me pagaban el Hotel y las comidas! Genial!!!

Norma llegó en algún momento de la madrugada, al otro día nos levantamos a desayunar (más rico porque pagaba LAN), y nos fuimos a lo de los Parraud!

A la noche salimos todos ahora (incluida Norma) en el transpolar de LAN de SGO a SYD, vía Auckland: 13 + 1.5 + 3.5. Matador! Será otra entrada...

LAN la verdad que vuela a horario (excepto en los vuelos dedicados a personas malhumoradas de negocios), y a las 7 AM del viernes (se pierde un día para los que no recuerden a Verne y la vuelta al mundo en 80 días) estaba en SYD esperando mis 7 valijas despachadas...

(Paréntesis: en SGO gracias al carisma de las niñas no me tuve que llevar las 7 valijas despachadas al hotel, sólo me llevé la que tenía la ropa de las niñas. Al otro día debería haber ido a LAN Cargo, pero me fuí al check in directamente, y me aseguraron que mis valijas estaban en el cargo del avión. Cool!)

Y me quedé esperando las 7 valijas! No llegaron! Ya siendo las 7:30AM de SYD, muerto de cansancio, me dirijo a la parte de reclamo de equipaje Lost/Found. La verdad que los australianos son buena onda. Las valijas estaban listadas en el sistema, pero en algún lugar del Pacífico. Le explico que mi destino final es Dili, East Timor, cosa que a los australianos no les mueve el pelo, y además le recalco que todo lo que no regalé o vendí esta en esas valijas... "Dónde lo ubicamos Mr?", y ahí tuve la gran idea de rutearlo a Albertina, que trabaja en UNMIT...

Después me dirijo a las oficinas de LAN, donde me atiende otra Sra muy amable, la verdad que estaba a punto de gritarle cualquier cosa pero esta gente se ve que vive muy bien: no tenía sentido ir con los botines de punta. Me tomó todos los datos, sacó fotocopia de todos los tickets de las valijas, me dió sus datos de contacto, y me fuí al hotel.

En el camino al hotel me dí cuenta que esto era genial: no tenía que arrastrar las valijas por todo Australia!

Me desconecté ("meimportaunculo"), me fuí a dormir, y esa noche partimos a Darwin con menos cosas para perder en el camino.

Al otro día en Darwin desayunamos tranquilo, sólo tuvimos que pedir un sólo taxi, en vez de dos si hubiese tenido las valijas, y nos dedicamos a almorzar y tomar agua, y jugar mientras esperábamos el vuelo a Dili.

Sabía que el Embraer E-120 de Air North era chico, no me dí cuenta lo chico que era hasta que lo ví. De nuevo: que grande que no tengo las valijas conmigo...

Y así llegamos a Dili, con 6 valijas menos, sólo la ropa de las niñas, que encima el 75% era de invierno!

Eloísa me vomitó encima, pobrecita, y yo con cada vez menos ropa. Obviamente que me importaba poco en ese momento, perdido con mi vista en el horizonte del mar de Dili, y Albertina salió a comprarme algo para vestirme. Yo traté de comprarme zapatillas, pero el número más grande es un 40, soy un 43, básicamente un 35% más grande que el promedio del Timorense masculino...

Fin de esta partida de Oca


El martes Albertina me llama, y me dice: "A nombre de quién mandaste las cosas?" "A nombre mío, atención Albertina Piterbarg que trabaja en UNMIT" (obviamente, puedo tener la mirada perdida en el horizonte, pero mis CPUs trabajan aún...) "Bueno, todas las valijas están en el aeropuerto"

Y así terminó esta partida de la Oca:
  • me gané una noche/día gratis en Santiago, vi a mis amigos y a mi ahijado, tomamos mate, y las niñas jugaron, descansamos,
  • No tuve que arrastrar las valijas por todo el Pacífico y Oceanía
  • Y llegaron todas a Dili, y no tuve que pagar exceso de equipaje!

Alguna vez se gana, no?

Veremos como la Oca me abrocha en la siguiente partida, recuerden que es así el Universo...

miércoles, 10 de septiembre de 2008

Reunificación de la familia cocodrilo (no apto para impresionables)


Sí, para aquellos que, agoreros del mal nos auguraban mil desgracias, me alegra comunicarles que estaban en lo cierto. El sábado al mediodía llegaron Norma, Eloísa, Emma y Silvio en evidente estado de shock y con cinco valijas menos. Silvio quedó -literalmente- con lo puesto mientras Norma miraba perdida algún horizonte lejano, Emma -qué raro- lloraba y Eloísa vomitaba sobre la única remera de su padre. Tanto fue el estado de emergencia que salí desesperada (como es habitual) a buscar ropa para Silvio por las calles polvorientas de Dili, sin suerte. Aquí la ropa de hombre (cuando la venden) es talle mínimo. Finalmente, conseguí el conjunto completo del Real Madrid en un XL que masomenos le entró. Claro que quedó con los zapatos Timberland sin medias (que también estaban vomitadas) y con el equipito del Real Madrid un tanto ridículo, pero qué remedio.

El lunes, sin anestesia, comenzaron las clases. Emma está INDIGNADA: no para de quejarse y amenazarme con todo tipo de violencia física si la sigo mandando a esa escuela. Eloísa más contenta, ya que no tiene contra qué comparar. Emma va a la QSI, que es método norteamericano. Eloísa va a la Dili International, que es australiana. A Emma le hablan en inglés, a Eloísa en inglés y en tétum. Eloísa va con su nanny: Felicidades, una jovencita timorense que se defiende muy bien. El patio del "playground", como le dicen aquí, es muy gracioso, ya que están todos los chiquitos de la edad de Eloísa, de todos los colores y nacionalidades jugando, coordinados por la maestra japonesa Yen y un ejército de nannys timorenses que, desde más atrás, custodian a cada uno de los multiculturales infantes.

Para aquellos que se preguntan como me va en el trabajo (porque de eso se trataba, ¿no? de que yo venía a triunfar al sudeste asiático) les comento que por ahora, me va como el reverendo ojete (perdón). "No es propicio cruzar las grandes aguas" me avisó el I-Ching antes de partir, pero yo no lo quise escuchar.

De todas formas, si dejamos de lado el detalle del desastre profesional, los vómitos de Eloísa, los llantos de Emma y la barba crecida de Silvio (que también mira enajenado el horizonte), nos quedan los efectos colaterales del Tropicur, el afano del alquiler, el volante del lado derecho, los cortes de luz, los campamentos de refugiados, los mosquitos, el dengue, la malaria, el yogourt a cinco dólares, el jet-lag de la familia que nos despierta a las 3AM cada madrugada y las llamadas a Buenos Aires donde también está casi todo (casi) mal, vale la pena destacar como decía el hermano Roberto de "Daylan Kifki": estamos fritos.

Refutadores de proyectos, abstenerse! Nada de: "Yo sabía", "Yo te dije", "¡Y claro! ¿Estos qué se pensaban?"... ni se les ocurra menear la cabeza y comentar al compañero de la derecha: "Qué locura, esta Albertina es una demente" o cosas parecidas. Ni se les ocurra, porque me queda el consuelo de los atardeceres, el mar y los panes que prepara Normita que cocina como una diosa.

Ahhhh... claro, me faltaron los gatos. Los CUATRO gatos. Sí, al principio hubo dos gatitas a la llegada de Emma a Dili, que la esperaban en una cajita. Dos gatitas que me consiguió el queridísimo Marcus, un compañero de trabajo que hace más de nueve años que vive aquí. Dos gatitas que no pararon de llorar y pedir por su mamá, sumándose a los llantos de mi propia cría.

Ya harta, el domingo llamé al querido Marcus pidiéndole que por piedad viniera a buscar a las gatitas, que lo único que me faltaba era que se murieran de hambre por no comer solas. Hablamos por celular y se ve que yo no comprendí muy bien su portugués porque cuando llegó al estacionamiento del compound, para mi sopresa, estaba con mamá gata y otra pequeña hermanita. Oh-My-God: eran CUATRO, sí, yo contaba bien, CUATRO malditos gatos. Deshaciéndome en millones de disculpas, bajo el tórrido calor del mediodía del domingo, le supliqué a Marcus que por favor se los llevara a todos, en medio de una escena desgarradora, mientras Emma no paraba de llorar y los niños timorenses -legítimos dueños de los felinos- reclamaban indignados sus veinte dólares.

viernes, 5 de septiembre de 2008

Cats, por Albert

Martes al mediodía. En mi living hay cinco grandes cajas de cartón, envíos de DHL que acaban de llegar de Buenos Aires. Las miro con desconfianza y me pregunto ¿en qué momento de imbecilidad extrema se me ocurrió la peregrina idea de que iba a necesitar todo el contenido de estas cinco enormes y amenazantes cajas? Seguro que es toda mi ropa de invierno. Seguro. Finalmente me animo. Abro la primera caja y sí, tengo razón. Me quiero morir: ahí está mi tapado de piel con la campera negra de cuero y toda una colección de sueters y ropa de abrigo que no tienen ni pies ni cabeza y que de sólo mirarla me da calor.

Hay algo hermoso y conmovedor en Dili: los atardeceres. Hoy por la tarde, al regreso desde Obrigado Barraks al “compound” (es decir, al condominio) donde estoy viviendo, elegí desviarme y tomar la avenida que bordea la costanera, sólo para ver la puesta de sol. Es un momento casi mágico del día, en el cual el mar se queda inmóvil y el cielo se pone rojo y violeta, apenas manchado por algunas nubes. Sobre el horizonte marítimo, allá en medio de la bruma, se recorta la silueta montañosa y precisa de Atauro Island. El camino serpentea, de cara al sol, hasta que se mete dentro de la isla otra vez, atraviesa un destartalado mercado callejero y el mar queda definitivamente atrás.

Si tuviera que elegir un gesto para caracterizar a este lugar elegiría la sonrisa. Los timorenes tienen una sonrisa bellísima, que les ilumina el rostro. Serios resultan secos y antipáticos, sin embargo, en apenas un segundo, un gesto de agradecimiento o una palabra amable logran que todo cambie y les estalle la sonrisa en la cara.


Esta isla es muy pequeña, apenas unos 16 mil metros cuadrados, menos que la provincia de Tucumán, que tiene unos 22 mil. Hay un millón de personas en todo el país. En Dili todavía abundan los campamentos de refugiados o desplazados, como lo quieran llamar. La gente (cientos, miles, depende del campamento) vive amontonada, en unas carpas tubulares blancas, bajo el sol y la lluvia, peor que en una villa, porque la falta de infraestructura es completa y la intimidad directamente, no existe. Familias enteras viven así desde hace años. Cerrar estos campamentos resulta muy complicado por muchísimas razones que no voy a enumerar aquí pero que básicamente tienen que ver con la extrema pobreza, la falta de educación, el desempleo, la inercia y la ayuda internacional, un cóctel realmente nefasto.



Resulta que desde que llegué estoy como loca buscando gatito para Emma. La semana pasada identifiqué a una chica portuguesa -abogada ella- y que trabaja para el Gobierno de Portugal, que tenía una gata que parió a unos cuantos gatitos. Entonces fui a buscarla y para mi sorpresa, en lugar de mostrarse feliz porque alguien quería hacerse cargo de un individuo de la prole, comenzó a interrogarme acerca de mi persona. “Yo no te conozco, no sé cómo lo vas a cuidar si te lo doy, no sé dónde vivís, etc. Etc.” La verdad es que me dejó con la boca abierta. Esa no me la esperaba. Ahora bien, entendamos que aquí se trata de establecer prioridades, es decir:

Primera prioridad: gato para Emma
Segunda: gato sano para Emma
Tercera prioridad: cagar a trompadas a esta pelotuda

Como lo más importante es hacerme de gatito y estos lucen sanísimos (porque sarnosos y esas maravillas prefiero evitarlas ya que en planeta-Timor no hay veterinarios), le contesté amablemente a cada una de sus imbéciles preguntas. Quedamos en que hoy viernes iba a ir a buscar el bendito gatito. En eso estaba hoy a eso de las tres de la tarde, perdida en mis ensoñaciones oficinescas salvaguardando la paz del planeta, cuando me llega un SMS. El mensaje era de la portuguesa que me preguntaba (lo juro por lo más sagrado) si el gatito iba a “tener patio para jugar al aire libre o si yo simplemente vivía en un apartamento". Así de sencillo y sin pudor. Le contesto que el gatito va a tener patio, piscina, cancha de tenis e incluso TV satelital.

¿Lo pueden creer? ¿¿¿¿¿AQUI????? Que en Dili me estén preguntando si el gatito tiene lugar para jugar es realmente lisérgico. Ya harta, la llamo y no, no me va a dar al gatito porque su novio (sic) tampoco me conoce… Interrumpo y pregunto. “¿Tu novio? ¿Y qué tiene que ver tu novio?”, “Es que está muy encariñado”, contesta. “¿Con quién?”, pregunto. “Con los gatitos”, contesta. Es viernes, son las 15,30. Mañana llega Emma a las 13,30. Eso me da unas 22 horas para encontrar un miserable gato. Corro desesperada por los pasillos de Obrigado Barraks, preguntándole a mis compañeros si alguno tiene un gatito. Me miran con pena. Yo puedo leer los subtítulos de sus pensamientos: “Pobre, qué mal está esta chica, siempre desbordada”. Marcos, un brasilero amable y gentil que hace siete años que vive acá me dice que sus vecinos tienen unos gatitos, tres en realidad, pero que seguro me van a querer vender (sí, vender) dos para que no se sientan solos. Me tienen cansada: ya se están aprovechando una vez más de mi nobleza. “Ok”, respiro y ya estoy dispuesta a negociar, “¿Cuánto?”. Me mira, piensa y contesta: “Diez dólares cada uno”.

Nochecita del viernes. Llego a casa y ahí están las cajas de DHL. Tomo un Tramontina con el puño cerrado, achico la mirada y me abalanzo sobre ellas.

Ya está. Después de más de dos horas y media de trabajo las cajas están desarmadas y rearmadas!!! Sí señores: dos cajas completas de ropa y boludeces de todo tipo que pienso donar a alguno de los campamentos de refugiados. La gente usa y revende las donaciones en improvisados mercados callejeros, como forma de hacer plata. Es la donación más cara de mi vida (porque no quieran saber cuánto costó traer todo esto hasta acá), pero necesaria. Me doy cuenta que no necesito tener tanto, que más vale regalar esos jeanes de hace diez años y que de ninguna manera y por ninguna razón quiero volverme tan alienada y minusválida mental como la portuguesa.

lunes, 1 de septiembre de 2008

Sighting of crocodile in the Wataboo Beach, por Albert

Así se titula un email que acabo de recibir en el que nos alertan al staff de Control acerca de la presencia de cocodrilos en las playas timorenses. No se preocupen, por favor, que estaré atenta y no dejaré que ninguna bestia salvaje me ataque. Ahora bien, también estoy interesadísima en ver a ese cocodrilo playero. Pobre cocodrilo, cuánta confusión. Y me pregunto en un momento de delirio si el cocodrilo tuviera email y recibiera alertas de sus colegas reptiles semiacuáticos qué diría acerca de nuestra presencia en estas playas. Porque de repente y sin querer, me sentí un poco cocodrilo yo también.